También conocida como Ley de Asequibilidad de la Renta, o RAA, por sus siglas en inglés, la Propuesta 21 espera extender las protecciones al control de alquileres a nivel estatal.
La proposición 21 revocaría la Ley de Vivienda de Alquiler Costa-Hawkins, la cual prohíbe a las ciudades aprobar ordenanzas de control de alquiler en propiedades construidas a partir de 1995. De ser aprobada esta propuesta, las ciudades podrían hacer justo eso. Pero esta nueva ley no afectaría a los dueños de dos o menos propiedades de renta.
Quizá todo esto suene familiar ya que en 2018 una iniciativa similar estuvo en la boleta, pero fue rechazada por un voto de 59 a 41 por ciento.
Esa misma idea ha retornado: la Propuesta 21 está patrocinada por el grupo La Vivienda es un Derecho Humano. Sus partidarios han invertido $3.5 millones en la obtención de más de un millón de firmas. Y la medida está respaldada por más de 200 personalidades destacadas incluyendo a Dolores Huerta, las diputadas Barbara Lee y Maxine Waters, el senador Bernie Sanders, y miembros de los ayuntamientos municipales de Alameda y Oakland.
Pero los opositores sostienen que esta propuesta empeoraría la crisis inmobiliaria, que limitaría la vivienda asequible, reduciría la disponibilidad de trabajo de mano de obra, así como los fondos públicos para servicios estatales y municipales. Algunas estadísticas demuestran que las protecciones al control de alquileres hacen que los propietarios arreglen y renueven sus propiedades con menor frecuencia. Los constructores de vivienda asequible, grupos de veteranos, sindicatos laborales y el gobierno local del Condado de Orange, son algunas de las entidades que se oponen a la propuesta.
Pues bien, si desea extender las protecciones al control de alquiler a nivel estatal, vote sí por la Propuesta 21. Si considera que esta no es la manera de resolver la crisis de vivienda en California, vote no.